Soy un padre que tiene en común una gran preocupación con muchas familias de niños con TEA. La preocupación constante de cómo ayudar a su hijo a desarrollar y fortalecer sus habilidades sociales. Los niños con autismo a menudo tienen dificultades en la comunicación y la interacción social, lo que se traduce que en situaciones del día a día como jugar con otros niños o participar en actividades de grupo, sean para ellos algo que les causa malestar y ansiedad. Sin embargo, existen estrategias y herramientas que pueden ayudar. Los juguetes no solo ofrecen entretenimiento, sino que también sirven como recursos valiosos para practicar habilidades sociales, mejorar la interacción y fomentar la inclusión de una manera divertida.
Cómo afectan las habilidades sociales en la vida de los niños con TEA
Las habilidades sociales son cruciales para que los niños puedan integrarse en su entorno y construir relaciones significativas. Según la Fundación Conectea, las limitaciones en la interpretación de señales sociales en niños con TEA pueden llevar a que se sientan aislados o frustrados al interactuar con sus compañeros.
En este sentido, el uso de juguetes específicos permite que los niños practiquen habilidades como el contacto visual, la expresión de emociones y el respeto de turnos, todo en un ambiente de bajo estrés y supervisado por padres o terapeutas.
Ejemplos de juguetes que facilitan el desarrollo de habilidades sociales
Antes de entrar en detalle, y como hemos remarcado al final del apartado anterior, hay que tener en cuenta que este tipo de juguetes para su correcto desarrollo se debe hacer de forma progresiva y con la ayuda de algún adulto que conozca bien al niño o niña. Al igual que los otros niños que puedan participar. Debe ser un trabajo en equipo y en el que se sepa que puede haber momentos de frustración y de algunas dificultades.
- Juegos de mesa colaborativos: Los juegos de mesa colaborativos. Son aquellos que implican trabajar en equipo para lograr un objetivo común y son ideales para enseñar la cooperación y la paciencia. Juegos como “El frutal” o “Animal sobre Animal” de HABA, cuyo funcionamiento hace que los jugadores trabajen juntos para alcanzar una meta compartida. Se enseñan a los niños el valor de la colaboración y les ayudan a comprender la dinámica de la comunicación en equipo, habilidades que son esenciales para integrarse en contextos sociales más amplios.
- Juguetes para el juego simbólico y de rol: Es ir más allá de los típicos “juegos de roles”. Es recomendable utilizar juguetes que permitan a los niños representar situaciones de la vida diaria. ¿Ejemplos? Una tienda, una consulta médica o una estación de bomberos. Estos juguetes ayudan a que los niños con TEA exploren roles sociales en casa, donde pueden aprender a interactuar y a interpretar diferentes perspectivas. Según el estudio de Pamela Wolfberg sobre el juego social Juego y el Espectro Autista: Fomentando Experiencias Sociales, Significativas con Familia y Amigos, estos juguetes no solo desarrollan el juego simbólico en los niños con autismo, sino que también les permiten explorar y expresar emociones que, de otro modo, podrían ser difíciles de comunicar.
- Juguetes de construcción colaborativa: Juegos como bloques de construcción colaborativa o sets de LEGO. Son juguetes en los que es necesario trabajar en equipo para crear una estructura. Se fomenta el diálogo y la coordinación entre niños. Estos juguetes no solo refuerzan las habilidades motrices y la planificación, sino que también enseñan a los niños a aceptar ayuda, a ofrecer apoyo a otros y a resolver conflictos en equipo. Actividades como construir una torre juntos ayudan a que los niños practiquen la comunicación efectiva y el respeto por el espacio y las acciones de los demás.
- Muñecos y juegos de emociones: Para los niños con TEA, identificar y comprender las emociones de los demás puede ser un desafío importante. Existen juguetes diseñados para este fin, como muñecos con diferentes expresiones faciales o juegos de cartas con emociones. Un buen ejemplo es este [Juego magnético de expresiones faciales]. Estos juguetes ayudan a los niños a reconocer y a practicar las diferentes emociones, un paso fundamental para mejorar la inteligencia emocional y la empatía. Estos juegos permiten que el niño observe y reconozca las emociones, un primer paso hacia la comprensión emocional en la vida real.
Consejos para padres sobre cómo facilitar el desarrollo social en casa
El juego en casa es un excelente contexto para fortalecer las habilidades sociales. Pero como siempre decimos, cuando los padres están comprometidos y participan activamente. A continuación, algunos consejos prácticos para que puedas hacer el mejor uso de estos juguetes de habilidades sociales:
- Hacer ejemplos de comportamiento social: Los padres pueden usar estos momentos para ejemplificar cómo actuar en diferentes situaciones sociales. Si el niño está jugando con un set de cocina, el padre puede asumir el papel de un cliente que pide comida. El niño puede aprender en este juego a cómo hacer preguntas y responder amablemente.
- Animar el contacto visual y la interacción verbal: Al jugar con el niño, los padres pueden animarle a hacer contacto visual y a responder de manera verbal. Esto puede lograrse a través de preguntas simples o al pedirle que describa lo que está haciendo, creando una conversación en torno al juego.
- Practicar el respeto por los turnos: Para niños que tienden a actuar de forma impulsiva, los juegos de mesa son ideales. Les enseña la espera y el respeto por los turnos. Los padres pueden recordar suavemente cuándo es el turno del niño y animarlo a esperar pacientemente cuando sea el turno de otro.
- Ofrecer refuerzos positivos: Cuando el niño logre completar una interacción social, como compartir un juguete o esperar su turno, los padres pueden ofrecer refuerzos positivos. Pueden ser palabras de ánimo, un abrazo o un pequeño premio. Esto ayudará a que el niño relacione el éxito en la interacción social con una experiencia positiva.
Cómo elegir los juguetes adecuados para cada niño
Es importante recordar que cada niño con TEA tiene características y necesidades únicas, por lo que es fundamental elegir los juguetes de habilidades sociales según los intereses específicos del niño y sus áreas de desarrollo. Hablar con un terapeuta o educador especializado puede ser útil para recibir recomendaciones personalizadas. Además, es recomendable seleccionar juguetes que puedan crecer con el niño, permitiéndole aprender nuevas habilidades a medida que se sienta más cómodo con la dinámica del juego social.
En definitiva, desarrollar habilidades sociales en niños con TEA requiere paciencia, creatividad y el uso de herramientas que les permitan practicar la interacción en un entorno seguro. Los juguetes, especialmente aquellos que fomentan el juego colaborativo, la expresión emocional y la empatía, ayudan a que los niños adquieran confianza en sus habilidades y se preparen para las interacciones en el mundo real. No es un reto sencillo. Pero la dedicación de los padres y el uso de juguetes adecuados pueden marcar una diferencia en la vida social de los niños con autismo.